MEMORIA AGRADECIDA EN EL “ALMUERZO SOLIDARIO 2019”: DAR LA VIDA “POR LOS ÚLTIMOS”

12 abril 2019

Este Viernes de Dolores recordamos el compromiso de nuestros misioneros, colaborando con la Campaña Solidaria Inspectorial y con nuestro Campamento Urbano

MEMORIA AGRADECIDA EN EL “ALMUERZO SOLIDARIO 2019”: DAR LA VIDA “POR LOS ÚLTIMOS”

Por: Equipo de Animación Pastoral San Rafael

 

Una escuela salesiana comprometida, si quiere ser una “escuela para el cambio”, creemos que debe promover la “atención a los últimos” (como nos recuerda “Jóvenes y Desarrollo”): trabajando esa mirada hacia “la población vulnerable, con especial cuidado de la infancia y juventud, haciendo efectivo su derecho a la Educación, fomentando el compromiso solidario de las personas para generar cambios en la sociedad”. ¡Es tan importante trabajar estos valores con las niñas y niños de nuestro cole! E igualmente cuidar nuestra formación como educadoras y educadores para acompañar a nuestro alumnado en este camino de la solidaridad y la justicia.

Por eso es tan significativo sumarnos a estas iniciativas como las que promueve nuestra Inspectoría “María Auxiliadora” desde sus tres ONGD: la Campaña “No hay sueños imposibles, ¡despierta!” cuenta con dos actividades ya tradicionales en San Rafael; la primera de ellas (la Merienda Solidaria de Don Bosco) dejó entre nosotros un recuerdo de agradecimiento por el despliegue de solidaridad y compromiso que generó; la segunda ha sido este “Almuerzo Solidario” del Viernes de Dolores (en el que también hemos apoyado el proyecto del Campamento Urbano 2019, que nuestra Obra impulsa cada verano), un Almuerzo para el que hemos contado con el voluntariado de la Hermandad del Cristo del Amor en tareas de preparativos (¡gracias, un año más! -y… María José, mejórate-).

 

Pero este año, la jornada (y sus previos) ha tenido una intensidad muy particular, entrañable… conectada a lo concreto de una vida entregada, regalada, ofrecida… Este Viernes de Dolores, para la gran Familia de San Rafael, ha venido unida a la memoria agradecida de Antonio César Fernández, salesiano cordobés asesinado en un ataque yihadista hace un par de meses. ¿Recordáis?: pues nosotros le hemos recordado, sí, en estas semanas y en el contexto de la campaña, y queremos compartir en este artículo nuestro emocionado recuerdo; hemos recuperado su presencia sencilla y humilde y sus entrañables palabras de agradecimiento al Señor por su vida y compromiso: “son los jóvenes quienes me han ido enseñando a ser salesiano… para mí es una acción de gracias porque no merezco esta vocación que me sobrepasa…” Días después de esta confesión, vivía su martirio y unía su destino -como siempre lo había hecho- al de Jesús Crucificado.

 

¿Por qué os contamos todo esto?

Apoyamos nuestra Campaña Inspectorial, el compromiso de nuestros salesianos “a pie de obra”, traducido en proyectos concretos de cooperación y ayuda al desarrollo, proyectos que buscan humanizar y dignificar la vida de las personas… salesianos (como tantos que conocemos y que nos han acompañado y acompañan en nuestra Casa), salesianos en la Misión, en proyectos a implementar en Togo, en Burkina Faso y en otros muchos países… (y escuchamos que Antonio César ¡fue fundador de la Obra Salesiana en Togo y ahora desarrollaba su ministerio en Burkina Faso!). Y cuando hablamos en Salesianos de “campaña solidaria, actividades en nuestros coles, ayuda al desarrollo, momentos para la sensibilización y concienciación, educación para el desarrollo, educar para la justicia y la solidaridad…”, estamos hablando de ESTO, de ESTO precisamente, de mujeres y hombres enamorados de Jesús, de Don Bosco y María Auxiliadora, ¡salesianos como nosotros!, que están jugándose la vida por Amor a los niños y jóvenes en países y contextos muy complicados, en las periferias, donde se ha de visibilizar, de veras y con radicalidad, que “para nosotros… primero, han de ser las últimas y los últimos”. Desde ahí, cobra sentido todo lo que hacemos y se llenan de “alma” nuestras actividades e iniciativas.

 

¡Gracias, una vez más, por vuestra colaboración con esta iniciativa del “Almuerzo Solidario”! Pero en esta ocasión experimentamos “un plus”: todos nos sentimos un poquito más unidos a la Misión, agradecidos por el compromiso de nuestros misioneros… Sí, así queremos que sea, precisamente de esto hablamos cuando trabajamos la solidaridad en nuestro cole: de que la historia y el futuro de las personas más vulnerables, en tantos rincones del mundo, cambia, mejora, se transforma, en cada vida entregada por AMOR. Como la de nuestros misioneros. Como la de Antonio César Fernández. Y nosotros podemos sentirnos cada día más corresponsables con ello.