Eran las 8 de la mañana, agolpados mamás, papás y nosotros junto a los autobuses estábamos alegres y ansiosos por empezar esta aventura que llevábamos tanto tiempo esperando. Por fin íbamos a pasar “dos días” con nuestros compañeros, fuera de casa. Nos pusimos en marcha, últimos saludos y besos a través de las ventanas.

En el autobús, chistes, canciones, lecturas y charla con los amigos y amigas. Las dos horas se nos pasadron volando.

Por fin, el cartel de Godelleta. Bajamos y nos esperaban un grupo de animados monitores que nos hablaban en inglés.

Almorzamos y empezamos con las actividades. Nos dividimos y mientras unos estudiaban la meteorología en una estación meteorológica, otros nos emocionábamos al ver cómo sufren los animales por culpa de la contaminación ¡Nunca más vamos a tirar plásticos al suelo! Tenemos que salvar el planeta.

También hemos jugado al “arco iris”, investigado sobre la lluvia ácida y muchas cosas más. No parabamos, no hemos tenido tiempo para aburrirnos. Ah, y también teníamos tiempo libre para jugar con los compañeros y compañeras.

Anoche bailamos un montón y después de cenar fuimos a un bosque oscuro y “tenebroso” a jugar a “la luciérnaga” ¡Qué divertido! Algunos estaban asustados al principio pero luego lo pasamos todos en grande.

A la hora de dormir estuvimos hablando hasta las tantas, los profes paseaban por los pasillos y nosotros nos hacíamos los dormidos y hablamos bajito para no molestar ¡Qué guay!

Esta mañana hemos ido de paseo por el entorno y hemos visto cómo las urbanizaciones y los vehículos afectan a los espacios naturales.

En fin, la comida estaba buenísima y los monitores han felicitado muchas veces a los profesores por nuestro comportamiento, participación y nivel de inglés.

Ya vemos San Rafael, las mamás y papás nos están esperando. Tenemos ganas de verles y contarles todo lo que hemos hecho, pero también tenemos pena de pensar que estos dos días de convivencia se han terminado. Estamos deseando que llegue la próxima.