Durante los días del Triduo Pascual hemos podido celebrar la Pascua Joven en Salesianos San Rafael. Un grupo de unos treinta chicos y chicas han decidido dejarlo todo y dedicar tres días a sus vidas y a lo que Dios pudiera estar pidiendo de ellos.
Por Manuel Hurtado, SDB. Coordinador de Pastoral.
Ha sido una experiencia muy intensa. Hemos descubierto que pensar, reflexionar y rezar también cansa. Pero ha merecido la pena. Hemos descubierto también que Dios nunca abandona, que siempre está aunque a veces no lo percibamos como nos gustaría, que su presencia misteriosa y resucitada guía nuestras vidas y que necesitamos gritar a todo el mundo, sobre todo a quien ha perdido ilusión y Esperanza, que ¡Cristo vive!
Que el Cristo resucitado inunde nuestros corazones y la llene de Vida plena, y que podamos transmitir a los que nos rodean la inmensa noticia de que Cristo está vivo, que hay una meta que es de verdad, y que merece la pena vivir y morir por ella.
Feliz Pascua a todos.